El alcalde de Ribadeo insiste en que obligará a cumplir las talas de árboles

El plazo para las cortas finaliza este jueves y el viernes inician el control de las que faltan por ejecutar

Recogida de madera talada junto a una casa, en Folgosa. P.V
photo_camera Recogida de madera talada junto a una casa, en Folgosa. P.V

El plazo para desbrozar y talar los árboles de masas forestales en un radio de 50 metros de cualquier casa de Galicia finaliza este jueves. El Ayuntamiento de Ribadeo emitió un bando avisando de que será obligatorio cumplir la legislación autonómica al respecto y hasta marcó los puntos exactos de las talas. El alcalde, Fernando Suárez, avisó el miércoles de que obligará a cumplir con las cortas establecidas y el viernes mismo empezarán a controlar las que faltan por ejecutarse porque dice que seguirán con el programa "agora xa en periodo forzoso forzando as talas que estaban contempladas".

A falta de datos más concretos que el propio Concello ribadense ofrecerá dentro de pocos días, Suárez Barcia reconoce que "os que pasaron a preguntarnos foron moitísimos. Tamén sabemos que os veciños que foron acometendo as talas foron cada vez máis conforme se foi achegando o prazo límite para o periodo voluntario".

Pero ahora queda la duda de lo que va a suceder, aunque el propio regidor la disipa: "Todo se fará como se dixo. Primeiro, porque hai que lembrar que isto non é unha ordenanza municipal nin nós inventamos nada no Concello. Esto trátase de facer cumprir unha orde autonómica que emana directamente da Xunta".

Y más allá de ello, Suárez Barcia también dice que "esto se vai a cumprir porque calquer outra cousa sería unha falta de respecto á xente que fixo as talas en periodo voluntario e que agora poderían vir perfectamente preguntando a ver que pasa se non facemos o que temos que facer, que é obrigar a cumprir a lei".

En principio, tal y como se planteó el sistema será muy parecido al que se está aplicando a edificios o fincas en mal estado que el Concello obliga a adecentar.

El Ayuntamiento multa y de no acometer la obra, en este caso la tala, los propietarios, es el propio Concello el que ejecuta los trabajos que posteriormente cobra de forma subsidiaria a los dueños. Esa es la idea que continúa vigente en la mente de los mandatarios municipales ribadenses que también lanzan el mensaje de que "non haberá excepcións".

APOYO. Queda pendiente, por el momento, la cuestión de la ayuda de la Xunta a esta iniciativa del Ayuntamiento ribadense. Recientemente el delegado territorial en Lugo, José Manuel Balseiro, criticó al alcalde por requerir personal autonómico para esta iniciativa mientras por otra parte rechazaba solicitar las brigadas forestales contra incendios, con lo que parecía que no habría apoyo autonómico.

Sin embargo, recientemente desde la Consellería de Medio Rural se pusieron en contacto con el Ayuntamiento de Ribadeo para preguntar qué precisarían, aunque la comunicación entre ambas administraciones se quedó ahí.

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