No hubo pérdidas humanas en el naufragio del Serenín al navegar hacia Avilés pero el accidente afectará económicamente a la tripulación y casa armadora, que posee las mayores cuotas individuales de todo el noroeste asignadas a este arrastrero. Este mismo viernes, el Ministerio de Pesca publicaba la asignación de posibilidades de pesca de cigala para este 2022 en el Cantábrico y Noroeste galaico, tras años de vedas y campañas científicas. La mayoría de barcos reciben entre el 1 y el 4% de cuota y al Serenín corresponden 1.733 kilos, el 14%. Tiene esos derechos y los del gemelo Abrela (ex Minchos Cuarto), dado de baja.
Además, el mismo barco siniestrado, de alta en la asociación provincial de armadores de litoral de Pontevedra (Arposur) zarpaba cada año con las mayores cuotas. En el ajuste y reparto de Pesca en marzo del año pasado, contemplando los acuerdos del Brexit con Reino Unido, al Serenín correspondieron 329,6 toneladas de merluza (el 12%), muy superiores a las del Eleuterio José Balayo (109) o a los derechos del burelés O Cantiño (68) y el celeirés Pino Ladra (60). Podía pescar 218 toneladas de jurel en la zona VIIIc (12,6%) más 1.258 tn. (10,3%) en la IX. Destaca la asignación de caballa a este arrastrero pues la Secretaría General de Pesca le calculó entonces al Serenín una cuota provisional adaptada de 1.160 toneladas de xarda (el 13% del total del arrastre) cuando el siguiente en cupo, el Baleiro 1º eran 413.216 kilos. Aparte, al Serenín le correspondían 50 toneladas más de cuota científica por probar cámaras a bordo. En la bacaladilla, otra especie objetivo, también disfrutaba del 13% en la VIIIc: 1.377 toneladas.
Según los reglamentos de pesca, el armador tendrá varios años para construir o comprar barco nuevo y durante dos puede no ir a pescar y optar por alquilarlas, o vender dichas cuotas. Fuentes del sector creen que no tendrá problema alguno en alquilar cupos, especialmente los de caballa.
