Testigos de la historia con 30 millones de años

Endesa entrega al Concello pontés un centenar de fósiles que se encontraron en las excavaciones de la mina, y entre los que destacan ranas, cocodrilos, caracolas o restos vegetales
Fósiles encontrados en las excavaciones de la mina de As Pontes. EP
photo_camera Fósiles encontrados en las excavaciones de la mina de As Pontes. EP

Dicen de los fósiles que son las fotografías más antiguas que conocemos, seres vivos convertidos en piedra, testigos de la historia y de un pasado tan remoto como inabarcable. En As Pontes la mina permitió que se conservasen mejor y, durante años, Endesa, que tomó las riendas de la explotación en los 70, fue guardándolos. Este miércoles, la eléctrica donó los fondos al Concello de As Pontes para que se puedan exponer y divulgar en una especie de máquina del tiempo que permite retroceder entre 30 y 21 millones de años atrás en un simple abrir y cerrar de ojos.

"La mina se cerró en el año 2008 y todas estas piezas, que tienen un valor incalculable, deben compartirse con los habitantes de la zona", expresó Pablo Blanco, el director de la central de ciclo combinado de Endesa en As Pontes y el encargado de materializar una donación tan esperada como interesante.

"Para el Concello es recuperar el patrimonio cultural de los ponteses para ponerlo a disposición de los vecinos y de los investigadores", destacó el concejal Antonio Alonso, que incidió en la importancia de dar forma a un archivo municipal y museológico. "El Concello tiene muchos espacios expositivos y varios inmuebles que se van a poner en valor y a los que les habrá que dar nuevos usos, como la antigua escuela de aprendices o la Casa da Enerxía, que podrían albergar estos fondos", barajó el edil sobre algunas posibilidades para un futuro cercano.


De los árboles a las lagunas 
Se conservan fósiles vegetales y animales, ya sean enteros o a través de fragmentos. Como los de las fotos.
1. Hojas y plantas
Hay varias hojas fosilizadas de diversas especies como olivo, nogal o sauce, pero también de otras en extinción o que hoy solo se encuentran en China. También hay troncos. 
2. Piñas
Aparecieron bastantes piñas, algo aplanadas por la presión que ejerció el carbón en ellas. 
3. Cocodrilos
En los años 80 se encontraron los primeros fragmentos. Hay restos de dentadura, vértebras o incluso placas de la coraza. Mediría un metro y medio. 
4. Ranas y caracoles
También se encontraron varios fósiles de ranas, algunos de los más llamativos porque se ven perfectamente. Pero también se hallaron gasterópodos o caracoles.

FONDOS. El pasado, por el contrario, queda lejos y se mide por millones de años a través de los fósiles que ahora son titularidad del Concello. En concreto, Endesa donó cien piezas y otros 300 sacos de material extraídos de las 19 capas de estéril y las 19 de carbón que daban forma a la mina.

"Todos pertenecen al Oligoceno o Mioceno inferior y de esta época estos son los únicos fósiles que se conservan en Galicia", indica Ramón J. Valle, responsable de Medio Ambiente de Endesa, mientras dibuja un paisaje diferente al que la memoria colectiva conoció después, probablemente lacustre —mucho antes de que el agua volviese a ser protagonista con el cierre de la mina y la creación del lago artificial más grande de España— con especies vegetales que ahora solo existen en climas subtropicales y donde habitaban animales ahora casi inimaginables en la zona, como es el caso de los cocodrilos.

El yacimiento de lignito pardo de As Pontes comenzó a formarse hace 29 millones de años y el proceso duró ocho millones. La explotación minera, que se remonta a la década de los 40 con la Empresa Nacional Calvo Sotelo, alcanzó una longitud de 6,2 kilómetros, con anchuras máximas de 2,9 kilómetros, y una profundidad de 288 metros. Fue ahí, en ese gigantesco agujero negro hoy teñido de azul, donde, entre 1976 y 2007, mientras se extraían 261 millones de toneladas de lignito y 697 de estériles, empezaron a aparecer los testigos de la vida de otros tiempos.

"El cocodrilo fue uno de los que causó más revuelo, pero todos los fósiles son muy importantes, están muy bien conservados y aportan mucha información", indica Valle, que asegura que hay muchos estudios que complementan la información de esos seres vivos convertidos en piedra, como una tesis de Manuel Casas, de la Universidad Autónoma de Madrid, que a través de 340 muestras de pólenes concreta los tipos de plantas que existieron en la zona.

Comentarios