Andan estos días los escolares del Ceip Veleiro Docampo de Castro de Ribeiras de Lea como niños con zapatos nuevos y no es para menos. Pero lo que ellos acaban de estrenar es su huerto escolar, que nace con una doble ración de cariño: la que le aportan ahora sus nuevos dueños con sus cultivos y la que pusieron en su día sus creadores, los alumnos de primero del ciclo de FP básica de Actividades Agropecuarias del vecino IES da Terra Chá José Trapero Pardo.
Esta iniciativa conjunta —que realmente nació el curso pasado pero se paralizó por la pandemia y se retomó este año— parte del colegio, dentro del Plan Proxecta de la Xunta con el Proxecto Terra con el título ‘Hortalíza-te e crea o teu patio’, con el que quieren transformar el espacio de juego del centro en patios dinámicos, para favorecer el juego en grupo, la cooperación y las relaciones intra e interpersonales de los niños.
La propuesta tendrá continuidad el próximo curso y se empezó en este con el huerto, para el que pidieron ayuda en el instituto y la respuesta no pudo ser más positiva, ya que les sirvió a los seis alumnos que participaron para poner en práctica sus conocimientos y ganar experiencia.
Así, instalaron tres bancales para cultivar, una zona elevada para producir fresas, dos palets cuyos huecos rellenaron con malla antihierba, y esta con sustrato de cultivo para plantar lechugas, y otros dos palets en vertical en una pared a modo de maceteros. También cerraron el recinto con una valla de madera y, en la zona que no es de cultivo, pusieron malla antihierba y corteza de pino por encima para facilitar su mantenimiento.
A la vuelta de las vacaciones de Semana Santa, los escolares pudieron ver el resultado final y, emocionados, empezaron a partir de esa semana con las plantaciones. «Gustoulles moito. É unha actividade na que traballan moitos valores e, ademais, ao ser ao aire libre este ano valórase máis», indican desde el colegio.
Los alumnos de infantil se encargaron de las plantas aromáticas, las lechugas y las fresas, mientras que los de primaria plantaron girasoles para pipas, zanahorias, ajos, judías, cebollas, patatas, puerros y brócoli. Ahora solo queda esperar que este proyecto siga dando frutos.
