El juzgado espera el análisis químico para ver si ordena detenciones por la niña de Muimenta

Los investigadores cuentan con tener los resultados en un día o dos para fijar con seguridad la causa de la muerte

Entierro en Roupar de la menor fallecida en Muimenta. EP
photo_camera Entierro en Roupar de la menor fallecida en Muimenta. EP

Algunos de los detalles que contiene la autopsia realizada a la niña de Muimenta que falleció el viernes han provocado un pequeño giro en la investigación, en la que ahora no se descartan detenciones en los próximos días. Según confirmaron a este diario fuentes conocedoras de la investigación, que sigue bajo secreto, la jueza que dirige el juzgado número 1 de Vilalba estaría esperando a recibir los resultados de los análisis toxicológicos de las muestras recogidas en el cadáver para decidir sobre posibles imputaciones.

Y es que, según parece, el resultado de la autopsia no ha podido ser concluyente ni en cuanto a la causa de la muerte. Sí se han hallado indicios de que la niña, de siete años, podría haber ingerido algún tipo de sustancia química, pero no se tiene la seguridad que eso sea lo que ha desencadenado tan terrible desenlace.

En estas circunstancias, los análisis toxicológicos serán determinantes. Los investigadores esperan tener en uno o dos días noticias del laboratorio, cuyas respuestas en estos casos sí suelen ser concluyentes. Hay que tener en cuenta que con estas pruebas no solo se puede saber qué tipo de sustancia química tenía la niña en el organismo, sino también las cantidades e incluso la pauta de consumo: si esa presencia se debe a una ingesta continuada en el tiempo o si los niveles se han alcanzado con una sola toma.

La pequeña apareció muerta el viernes a primera hora de la mañana en la cama en la que dormía con su madre, en la casa de Muimenta en la que vivían junto a la abuela de la criatura. Esta y la madre avisaron a los servicios de Emergencia al ir a despertar a la niña para llevarla al colegio y ver que no respondía.

Cuando la ambulancia llegó, solo pudo constatar el fallecimiento. Tampoco había evidencias que hicieran pensar en una muerte violenta, pero en el lugar se recogieron pastillas de potente efecto que tomaba la madre para tratar una depresión que personas cercanas a la familia definen como bastante profunda.

No obstante, las fuentes consultadas insisten en mantener toda la prudencia exigible en un suceso con estas implicaciones y no descartan ninguna opción. Ni siquiera que de confirmarse la presencia de sustancias químicas en el cuerpo de la niña, estas hayan sido las causantes de su muerte. Recuerdan, en este sentido, casos como el de Asunta, la niña de Santiago que fue asesinada por sus padres: el análisis demostró que sí había ingerido medicamentos ajenos a cualquier enfermedad que padeciera, pero no fue esa la causa del fallecimiento.

La presencia de sustancias químicas en la niña no significa que esa sea la causa de la muerte

Manteniendo esa prudencia, sin embargo, personas cercanas a la investigación con las que ha hablado El Progreso tampoco descartan que los resultados toxicológicos puedan dar lugar a detenciones en los próximos días. Mientras tanto, la madre de la pequeña sigue ingresada en la Unidad de Psiquiatría del Hula, adonde fue trasladada en la misma mañana del viernes tras sufrir un brote de ansiedad que empeoró la dolencia psiquiátrica que ya venía arrastrando desde hace tiempo.

PROTOCOLO ANTISUICIDIO. Por este motivo, la vigilancia a la que está sometida en este módulo es extrema y, además de la sedación y la medicación necesaria, se le ha aplicado además el protocolo antisuicidio. Algunas fuentes aseguraron que, de hecho, podría haber intentado autolesionarse recientemente.

Tampoco el juzgado ni los investigadores de la Policía Judicial de la Guardia Civil han considerado necesario poner ningún tipo de vigilancia en el lugar. Las normas que rigen en el módulo de Psiquiatría ya son garantía suficiente, puesto que, al contrario que en el resto de unidades, dispone de una puerta que permanece siempre cerrada y que solo se abre desde dentro cuando llaman los profesionales que trabajan allí o visitas previamente autorizadas.

La madre, de hecho, ha recibido tanto llamadas telefónicas como visitas estos días, si bien los médicos no ha considerado prudente que, dado su estado, pudiera acudir al funeral de su hija, que se celebró este domingo.