El Concello de Guitiriz acaba de adjudicar los trabajos de digitalización del archivo municipal, en el que se conservan escritos desde el año 1836, con el propósito tanto de "garantir a preservación dos documentos" como de "darlle valor a este patrimonio municipal", tal y como destacó la alcaldesa, Marisol Morandeira.
"Sería unha pena que se perdesen todos eses documentos, porque hai algúns moi curiosos e ademais gardan a nosa historia", destacó la regidora municipal, que incidió en que se ha apostado por su digitalización para poder "telos a disposición de todo o mundo, para que quen queira os poida consultar", dado que el manejo de los archivos en papel es mucho más complejo y delicado y que estos requieren "unhas condicións de mantemento moito máis complexas", puntualiza Morandeira.
"É importante telos a salvo", concluyó la alcaldesa, que precisó que por ese motivo se optó por solicitar unha subvención a la Xunta para poder llevar a cabo este proyecto, al que se destina un prespuesto de más de 40.000 euros.
Así, a través da iniciativa y con estos fondos lo que el Concello pretende es "evitar a deterioración física ocasionada polo manexo manual, conservar os contidos a longo prazo e identificar e describir os documentos dixitalizados cos seus correspondentes esquemas de metadatos", precisan, además de avanzar que se trabajará para difundir estos contenidos en la web municipal e integrarlos en el archivo electrónico de Patrimonio de Galicia.
HASTA 1959. La empresa adjudicataria dispondrá de unos cuatro meses para salvaguardar más de 100 años de la historia local, desde 1836 -los documentos más antiguos se corresponden con las actas de las sesiones plenarias de todo ese año, que presentan un estado deteriorado- hasta 1959 -hay mucha más documentación abarcada hasta este año, como correspondencia, expedientes personales, legajos de distribución de agua, inspecciones en ferias y mercados, etc.-.
Entre las cerca de 60.000 páginas y 416 expedientes a digitalizar se conserva documentación de todo tipo, como la construcción de un cementerio musulmán en Guitiriz en 1937 -durante la Guerra Civil hubo combatientes musulmanes, por lo que se construyó una mezquita en el balneario-, una epidemia de gripe en 1957, la desobediencia de un alcalde de barrio en agosto de 1926, los consumos de cereales de 1919, registros de matrimonios y defunciones o cuadros de personal.
