Los presidentes de Endesa, Borja Prado, y de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, han asistido este martes al inicio oficial de la reforma de la central térmica de As Pontes, obligada para su adaptación a la normativa medioambiental europea y que supondrá una inversión de más de 200 millones de euros.
El grupo energético incide en que el proyecto permitirá reducir un 71% las emisiones de dióxido de azufre y además se rebajarán en un 62,5% para los óxidos de nitrógeno y un 80% en emisión de partículas, según la previsión. Además, Prado ha asegurado que las obras permitirán "prolongar la vida de esta planta durante 25 años".
Prado y Núñez Feijóo han recorrido las instalaciones junto a autoridades como el alcalde pontés y presidente de la Diputación de A Coruña, Valentín González Formoso; el conselleiro de Economía, Francisco Conde, o directivos de la propia compañía.
La empresa ha destacado durante este acto que genera hasta 700 empleos directos en la zona, estimando su impacto económico en el entorno en los 80 millones de euros por salarios y compra de bienes y servicios.
Sus cuatro grupos energéticos generaron en 2017, según ha destacado la empresa, 8.366 gigavatios por hora.
En una alocución al término de la visita, el presidente de Endesa ha observado que Galicia es "clave" para la compañía y ha destacado la "voluntad de contribuir al desarrollo y a la mejora de la calidad de vida de su gente".
Por su parte, Formoso ha saludado los "esfuerzos" y la "agilidad" de la Xunta ante el presente proyecto.
Mientras, el mandatario autonómico ha reivindicado el "compromiso del Gobierno gallego con una industria energéticamente eficiente, respetuosa con el medio y en la primera línea del sector en España".
A su juicio, las obras anunciadas permiten que la central impulse "su viabilidad y su carácter estratégico".
"La construcción de dos nuevas plantas donde se eliminarán los gases producidos por la quema de carbón permitirá reducir las emisiones de acuerdo con la directiva europea", ha remarcado Feijóo. El presidente de la Xunta ha apreciado que el recinto es uno de los "pulmones energéticos" del territorio peninsular. A su juicio, se pone en marcha una "enorme inversión", que constituye un "reto" para la firma.
Endesa prevé recurrir para estos trabajos a unas 1.000 personas ajenas a la firma.
El plan se pone en marcha con la instalación de un sistema de desnitrificación de gases de combustión en cada grupo del recinto, que ganará 14.000 metros cuadrados de superficie al ocupar la carretera autonómica de acceso a la villa, a sustituir por un nuevo vial que pagará la compañía.
