Ana Sandamil, en su intervención final: "No sé cómo pasó lo que pasó. Era la niña de mis ojos"

La madre de Desirée Leal ejerció su derecho a la última palabra en el juicio que quedó visto para sentencia en la Audiencia Provincial de Lugo ► Las acusaciones mantuvieron su petición de presión permanente revisable
Ana Sandamil. VICTORIA RODRÍGUEZ
photo_camera Ana Sandamil. VICTORIA RODRÍGUEZ

La última jornada del juicio por la muerte de Desirée Leal, ocurrida en mayo de 2019 en Muimenta, se desarrolla este lunes con la defensa de las conclusiones de todas las partes. A la entrada de la Audiencia Provincial de Lugo, los abogados de las acusaciones particular y popular ya adelantaron que mantendrían la petición de prisión permanente revisable, algo que hicieron posterioremente durante la vista. Por su parte, la defensa de Ana Sandamil continúa reclamando la absolución de la madre de Desirée al entender que tenía sus facultades mentales "anuladas". 

La madre de la niña y única acusada, Ana Sandamil, ejerció su derecho a la última palabra. El jurado popular tendrá que decidir ahora si es culpable.

ANA SANDAMIL. El juicio por la muerte de Desirée Leal, que este lunes ha quedado visto para sentencia, concluyó con la intervención de Ana Sandamil, quien ha dicho: "No sé cómo pasó lo que pasó. Era la niña de mis ojos".

Esta mujer de 45 años, única acusada del crimen, ha afirmado en la sala que ella solamente quería que la pequeña, que tenía seite cuando sufrió esa muerte violenta, fuese "feliz", independientemente del con quién, del cómo y del dónde.

"Yo quería a mi hija", "para mí lo era todo", "jamás le haría daño", "no recuerdo lo que pasó esa noche", "(Desi) es lo mejor que me pasó", "nuestra relación era muy estrecha"... han sido algunas de sus reflexiones de Sandamil, con llanto entrecortado.

"Jamás actuaría así en mis plenas facultades. No soy así. No le hago daño a la gente. La quería con toda mi fuerza", ha ahondado, y ha compartido en esta vista, que se ha celebrado con jurado popular, que todavía no se cree "que no la pueda volver a ver". "Es increíble".
 

DEFENSA. La defensa de la madre de Desirée mantiene la petición de absolución al alegar que tenía "anuladas" sus facultades mentales o bien "limitadas de forma muy importante".

Su letrado, en las exposiciones finales, ha entendido que tiene "más peso probatorio" lo relatado por la psiquiatra que la atendió en el Hula y por la profesional que lo hizo en la prisión de Teixeiro.

La defensa sostiene que Ana Sandamil tenía sus facultades "anuladas o limitadas de forma muy importante"

"La razón de ciencia mayor" se sitúa al lado de estas especialistas, que han tenido un seguimiento sobre ella, ha expuesto, frente a las dos entrevistas en sendas mañanas de los expertos del Instituto de Medicina Legal de Galicia que hablaron de una persona imputable, consciente de lo que estaba haciendo, por lo que no habría lugar para esa eximente completa que determinaría el pronunciamiento demandado.

Desirée Leal, cuyo padre, José Manuel, ejerce la acusación particular, fue encontrada muerta en la habitación en la que pernoctó con su madre y presunta verdugo con señales de haber sido forzada a ingerir un líquido en el que supuestamente se había disuelto un fármaco que consumía Ana Sandamil y que se llamaba Trazodona.

En el examen forense, en el cadáver se vieron señales de una asfixia mecánica, la que habría causado el óbito. 
La defensa de Ana Sandamil solicita la libre absolución al presentarla como una enferma mental. 

ACUSACIÓN POPULAR. La acusación popular, que ejerce la Fundación Amigos de Galicia, ha mantenido en la última sesión, este lunes, la petición de prisión permanente revisable para la acusada, Ana Sandamil, madre de la víctima, y ha descartado que el crimen se debiese a los "delirios".

La acusación popular descarta que el crimen se produjese por "delirios"

En la exposición final, el abogado de esta parte, Francisco José Lago, ha remarcado, como antes las acusaciones pública y particular, que lo único que se puede aceptar, y a tenor de lo dicho por los forenses, es que las facultades "volitivas" estuviesen "parcialmente" alteradas y, en ningún caso, de modo grave y menos sin ser consciente de lo que está bien y mal.

"Comprendía. Tenía conocimiento de lo que estaba haciendo". Lo que sí ha rechazado este letrado, además, es "causalidad" entre el "delirio" y el "objeto" sobre el que recae el mismo, que en ningún caso estaba centrado en la menor y sí en el padre de la cría, José Manuel Leal, del que estaba separada.

LA ACUSACIÓN PARTICULAR. La acusación particular, que ejerce José Manuel Leal, el padre de Desirée, solamente asume afectación leve en el juicio que se sigue contra la madre de la niña, Ana Sandamil, y que este lunes quedará visto para sentencia tras las conclusiones finales y el derecho a la última palabra de la procesada.

La eximente completa, que conllevaría pronunciamiento absolutorio, no tendrá recorrido, según el abogado Manuel Ferreiro, y el hecho de que hubiese sido plenamente consciente, ya no está sobre la mesa, porque esta parte ha introducido ese matiz, por lo que han ido diciendo los expertos y aún creyendo que era "plenamente consciente"

La acusación particular defiende que "una coartada te conecta con la realidad"

Ha lanzado en sala el letrado la pregunta de si alguien puede decir que su afectación era grave, lo que comportaría rebaja de penas, cuando la que se pide es la prisión permanente revisable, la máxima que permite el Código Penal. Y ha añadido que, si los forenses no han determinado eso, y siempre han hablado de aceptación parcial, duda que alguien más pueda llegar a tamaña determinación.

"Si existen dudas razonables, tienen que ir a la leve", ha apuntado con todo Ferreiro, y ha recordado que "una coartada te conecta con la realidad" y esta existía: la de una ingesta medicamentosa. Eso, cuando la causa real del fallecimiento fue "estrangulamiento y asfixia".

FISCALÍA. El Ministerio Fiscal ha mantenido la pena de prisión permanente revisable para Ana Sandamil, al considerar que la clave está en el "odio" de la única acusada al padre de la niña, su ex José Manuel Leal, y, a la vez, en la "cosificación" de la menor.

En las exposiciones finales, la representante de la acusación pública ha indicado que la víctima falleció por asfixia mecánica por compresión y luchó por su vida y, si bien su presunta verdugo tenía sus facultades afectadas "en lo mínimo", esto era "no más allá de lo mínimo", pues en modo alguno estaba "anulada".

"La quería mucho sí, pero bien, no", ha dicho la fiscal este lunes en la última sesión de la vista oral, en la que ha enumerado varias conexiones con la realidad, como que Ana Sandamil diese el número de su tarjeta sanitaria, como que se negase a entregar el móvil, a firmar una declaración por no tener membrete oficial o al hecho de que el pijama con sangre de la cría apareciese envuelto debajo de la cama.

EL PADRE. El padre de Desirée, José Manuel Leal, sostuvo este lunes, antes de que comenzase la última jornada del juicio por el crimen de Muimenta, en la que las partes expondrán sus conclusiones, que en la vista oral ha quedado "suficientemente claro quien fue la autora y como cometió este brutal asesinato".

A la espera de la conclusión de la vista oral, para que el jurado comience a deliberar, insistió en que Ana Sandamil "no merece otra cosa que la pena de prisión máxima estipulada en este país a día de hoy, que es la prisión permanente revisable".