El arte de dar vida a Diógenes

La artesana pontesa Carmen Bellas retoma su pasión por el diseño con Coloquetengo, un proyecto de "segundas oportunidades" a través del que crea con materiales olvidados

La artesana pontesa pontesa Carmen Bellas, en su taller. CRISTINA ARIAS
photo_camera La artesana pontesa pontesa Carmen Bellas, en su taller. CRISTINA ARIAS

"Dicen de mí que tengo un poquito de síndrome de Diógenes, porque en lo que los demás ven basura yo veo oportunidades". Así se presenta la artista y artesana pontesa Carmen Bellas. Licenciada en  Bellas Artes, lleva dos décadas iniciando a los más pequeños en el mundo de la pintura y el color, pero siempre dejó un espacio para dar rienda suelta a su creatividad en el diseño, una pasión que retoma estrenándose con una tienda online con el proyecto Conloquetengo.

"Siempre diseñé y creé cosas, tuve colecciones de complementos o camisetas, pero nació mi hija y lo dejé un poco de lado. Llevaba tiempo pensando en volver y hace cinco meses abrí la tienda online", explica Carmen mientras habla de una filosofía y una forma de entender el mundo que se refleja en cada pieza.

"Conloquetengo es un proyecto de segundas oportunidades. Las materias primas que empleo son materiales olvidados, servilletas, manteles, cortinas, tapetes que tienen nuestras madres o abuelas... cosas que ya no usamos. La gente me dona algunas, otras las busco en mercadillos o restos de fábricas. Y mi objetivo es transformar los materiales y sacar su potencial para convertirlos en una pieza única, atemporal, que nos guste llevar, que sea apetecible", dice, y muestra pequeñas colecciones cuidadas al detalle: collares, pulseras, bolsos y bolsas, que se complementan con el empaquetado, en algodón y con un breve resumen sobre el recorrido de todos sus materiales.

Lleva pocos meses —tiene perfil en Facebook e Instagram y pretende empezar a buscar huecos en tiendas físicas— y reconoce que es difícil vivir del arte, pero su cabeza está llena de ideas. "El hecho de que sea material reutilizado le da a las piezas un valor añadido. Hay un proceso de limpieza, recuperación... para crear algo único. No intento disimular los fallitos cuando trabajo con maderas u otros materiales porque me inspiro en ellos. Creo a partir de ellos. Casi nunca dibujo las piezas antes", explica, al tiempo que describe un proceso "un poco mágico" que sorprendería al propio Diógenes. El filósofo griego que da nombre al trastorno que lleva a la acumulación de cosas defendía justo lo contrario. 

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