Sacan 32 cuerpos enterrados en tierra hace décadas tras morir sin recursos

El proceso se inició con el desenterramiento ayer de los restos de 9 personas a las que en su día tuvo que dar sepultura el Ayuntamiento
Los operarios de Serfuja recogen restos de cadáveres enterrados hace tres décadas, que serán llevados a un osario común. SEBAS SENANDE
photo_camera Los operarios de Serfuja recogen restos de cadáveres enterrados hace tres décadas, que serán llevados a un osario común. SEBAS SENANDE

El Concello inició este lunes, en el cementerio de San Froilán, la retirada de los cuerpos de32 personas fallecidas que fueron enterradas hace tres décadas bajo tierra -entre 1989 y 1991- por carecer de nicho o sepultura y también por no disponer de recursos.

La edil Cristina López indicó que se destinan 8.894 a esos trabajos, que fueron encargados a la empresa funeraria Serfuja. La firma comenzó este lunes con el levantamiento de tierra en la zona destinada para tal fin en el cementerio y llevó a cabo ya la retirada de los restos humanos y de los féretros de nueve fallecidos, quienes fueron identificados por los empleados del cementerio en base a los datos archivados del lugar en el que fueron depositados.

Los enterramientos se realizaron en su día a un metro de profundidad. Los restos orgánicos de cada fallecido se meten en una bolsa de plástico y, posteriormente, si nadie los reclama para su enterramiento en otro lugar, serán depositados en un osario común por los operarios del cementerio, donde permanecerán seis meses.

Los residuos de material inorgánico tales como madera, cristal, plástico o ropa son también clasificados y enviados para su tratamiento y recogida en contenedores por una empresa especializada. "Este é un traballo que xa fixemos noutros cemiterios pero, neste caso, ten como particularidade que os féretros foron soterrados directamente baixo terra cando o habitual, noutros camposantos, é que estean nun nicho ou sepulcro. Actualmente, xa non está permitido facer soterramentos baixo terra", explica Jorge Balado, gerente de Serfuja.

Llegó el momento de desenterrarlos ante la necesidad de construir nuevas sepulturas en el cementerio

Lo habitual es que este procedimiento se lleve a cabo a los cinco años de producirse este tipo de enterramientos sin sepultura en concesión. Sin embargo, en este caso, los féretros permanecieron ahí dado que el Concello no necesitó de ese espacio en el cementerio para llevar a cabo otros proyectos -según cuenta el encargado del cementerio, Serafín Saavedra-, por lo que estos fallecidos contaron finalmente con una prórroga de 30 años en el lugar donde fueron enterrados.

PROYECTO. Ahora, en cambio, llegó el momento de desenterrarlos ante la necesidad de construir nuevas sepulturas en el cementerio dado que ya no quedan para futuras concesiones.

"Necesitamos construír novas sepulturas e utilizar ese espazo onde se soterraban os falecidos que nos viñan a través dos servizos sociais como indixentes ou persoas que non tiñan familia. Aí o Concello ten previsto facer 30 sepulturas novas, de tres niveis, polo que poderán ser soterradas 90 persoas nun principio", explica Serafín Saavedra.

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