"Mi padre está en una residencia por no dejarlo entrar en casa los okupas"

El hijo de un anciano ingresado en un geriátrico acusa a una familia que convivía con el mayor de impedirle volver al piso de este, después de recibir una alta hospitalaria, y de quedarse a vivir allí sin su consentimiento
La vivienda está situada en el casco histórico, en las inmediaciones de Quiroga Ballesteros. VICTORIA RODRÍGUEZ
photo_camera La vivienda está situada en el casco histórico, en las inmediaciones de Quiroga Ballesteros. VICTORIA RODRÍGUEZ

"Esto es tremendo. Al recibir un alta hospitalaria, mi padre se vio obligado a irse a vivir a una residencia al negarle la familia que acogió en su piso, y que ahora son unos okupas, la entrada en su propia casa". Así resume Elías Vázquez Vázquez la situación que está viviendo. Este lucense lucha ahora por recuperar el piso de su padre, en el centro de Lugo, tras pedirles a los ocupantes, por enésima vez, que abandonen la vivienda. Es una exigencia, según dice, que ya les planteó su padre antes, sin éxito.

La familia a la que acusa de okupa—compuesta por una pareja, su hijo y otra niña más— fue acogida de buena fe por el anciano hace un año dado que eran conocidos de una mujer que, tiempo atrás, había sido contratada como cuidadora de un hermano del anciano en el mismo piso. La familia se presentó en la casa del anciano pidiéndole que les diese cobijo, al tener dificultades para encontrar piso, a lo que —según la versión del hijo— accedió el anciano pero solo de forma temporal, por unos días.

"Mi padre los acogió de buena voluntad, solo porque eran conocidos de la antigua cuidadora de mi tío y porque venían de Honduras y estaban de forma ilegal en España. Pero esta familia nunca lo cuidó a él, porque mi padre se valía solo. Podía hacer la comida y poner la lavadora, no necesitaba que lo cuidasen y la condición era que solo era por unos días, pero ahora no quieren marcharse y eso que mi padre les dijo ya, en varias ocasiones, que eran mucha gente en casa y que quería estar solo. Y nada, llevan un año ya en el piso", explica el hijo del anciano.

Elías Vázquez también afirma que, hace solo unos días, acudió al piso —con su propia llave— para recoger ropa de su padre que necesita en la residencia pero la actitud de la familia que vive allí fue llamar inmediatamente a la Policía por "allanamiento de morada". "Llamaron a la Policía y me acabaron echando de allí, como si no fuese la casa de mi padre, aunque los agentes se portaron bien conmigo", indica el hijo del anciano.

Retirada de 8.500 euros del cajero

Elías Vázquez también culpa a la familia que está viviendo en casa de su padre de retirar hasta 8.500 euros, con la tarjeta de este y sin su consentimiento en un cajero de Lugo y en otro de Castro de Ribeiras de Lea. "Fueron 8.500 euros en total. De estos, 8.000 se retiraron, en distintas veces, en un cajero de Lugo, y el resto, 500, en otro de Castro. Nosotros no lo sabíamos porque no llevábamos el control de su cuenta y nos encontramos ahora con esto, sin que mi padre supiese nada", cuenta Elías Vázquez.
De momento, el anciano no interpuso denuncia en la Policía ni sobre estos hechos, ni sobre la supuesta ocupación del piso.

Elías Vázquez añade, asimismo, que los gastos de esta familia en la vivienda están corriendo a cargo de su padre, cuya pensión no es suficiente, ahora mismo, para pagar la residencia y lo demás.