"Los oncólogos de pulmón estamos sensibilizados con la visión de género"

Pilar Garrido, jeja de Oncología del hospital Ramón y Cajal, cerró este viernes con una charla sobre las particularidades de esos tumores en mujeres una reunión del grupo gallego de la especialidad
Pilar Garrido, este viernes en el Hula. VICTORIA RODRÍGUEZ
photo_camera Pilar Garrido, este viernes en el Hula. VICTORIA RODRÍGUEZ

La jefa de Oncología del hospital madrileño Ramón y Cajal y miembro fundador de la Asociación para la Investigación del Cáncer de Pulmón en Mujeres, Pilar Garrido, aseguró este viernes en el Hula que los médicos especialistas en ese tipo de tumores están "sensibilizados con la visión de género". Su charla, Cáncer de pulmón en mujeres cerró la reunión del grupo gallego de la especialidad.

Aseguró que, si bien hace una década sí se podía reconocer un sesgo de género en el diagnóstico –con una rotunda mayoría de pacientes masculinos, inicialmente se tendía a atribuir los síntomas que presentaba una mujer a otra cosa– el aumento de casos a raíz del creciente número de mujeres fumadoras desde los 70 y 80 ha acabado con él. Ahora iguales síntomas generan la misma sospecha.

Explicó que también influye en esa sensibilidad el hecho de que haya un tipo de cáncer de pulmón, el de mutación EGFR, que aparece principalmente en mujeres. Pero reconoció que donde aún queda mucho por hacer a la hora de aplicar perspectiva de género es en investigación. "Hay indicios que apuntan a que algún tratamiento parece resultar más eficaz en mujeres que en hombres", dijo, y al revés en otros. Pero no existen aún certezas. "Por supuesto que, si tienen el mismo tipo de tumor se prescribe el mismo tratamiento a un hombre que a una mujer. Lo que tenemos son solo estudios retrospectivos, revisiones, que no suponen una evidencia científica sólida por lo que si no lo hiciéramos estaríamos privando a un paciente de un tratamiento potencialmente eficaz", recordó.

Sin embargo, la situación puede cambiar en los próximos años si se empieza a aplicar de forma rigurosa la perspectiva de género a la investigación y esas meras sospechas se convierten en evidencia rotunda. La doctora Garrido recordó que, en investigación básica, se suelen recurrir a ratones masculinos y en los ensayos clínicos hay una mayoría de hombres. Tradicionalmente se ha usado evidencia construida con lo observado en hombres para diseñar tratamientos universales. "En muchos ensayos clínicos vemos esa discrepancia entre el porcentaje de hombres y mujeres participantes", reconoció la oncóloga.

Recordó que es necesario observarlo también desde la perspectiva social, preguntarse si se les ofrece a las mujeres con la misma frecuencia que a los hombres entrar en esos ensayos y si ellas lo rechazan más porque, por ejemplo, quieren evitar reiteradas visitas al hospital porque son las que asumen los cuidados de hijos o mayores.

Los casos de cáncer de pulmón entre mujeres, como los de los hombres, están abrumadoramente vinculados al tabaquismo por lo que, según insistió la especialista, lo mejor que se puede hacer por prevenirlo es dejar de fumar cuanto antes o, preferentemente, no empezar nunca. Admitió que no existe acuerdo unánime sobre si un exfumador puede llegar al punto en el que su riesgo sea igual al de una persona que nunca ha llegado a hacerlo. Algunos estudios dicen que ocurre tras veinte años sin consumir tabaco y otros que no pasa nunca, el hecho de haber fumado alguna vez siempre supone un incremento del riesgo. "Lo que está claro es que cuanto antes se deje, mejor", insistió.

Aunque aclaró que en España la situación todavía no es esa, explicó que, en lugares como Estados Unidos, en los que se generalizó el hábito de fumar entre las mujeres mucho antes, la tasa de mortalidad por cáncer de pulmón en mujeres ya supera a la de los tumores de mama y colon juntos.

Cribado para fumadores y exfumadores

La doctora Garrido se declaró convencida de la pertinencia de establecer el cribado de cáncer de pulmón, dirigido a la población de riesgo; es decir a fumadores y exfumadores.

Explicó que el reto de este tipo de cribado –frente a otros como el de mama o colon que son universales y en los que se invita a los participantes simplemente cuando alcanzan cierta edad– es el de localizar a esa población de riesgo. "No existe un censo de fumadores", y recordó que la base de esa clase de programas debe ser que todos los que se puedan beneficiar de ellos puedan tener acceso.

El objetivo de un programa de cribado es lograr diagnósticos más precoces.