Dos abusadores sexuales de Lugo piden rebaja de pena por la ley del 'solo sí es sí'

Uno de los condenados fue acusado de actuar contra tres menores de su familia y el otro torturó y violó a su pareja
Sede de la Audiencia Provincial de Lugo. SEBAS SENANDE
photo_camera Sede de la Audiencia Provincial de Lugo. SEBAS SENANDE

Era cuestión de tiempo que la polémica sobre la aplicación de la ley del solo sí es sí llegara a Lugo. La Audiencia Provincial ha recibido dos peticiones de dos condenados por delitos sexuales para que se les rebaje la pena, en aplicación de la norma impulsada por el Ministerio de Igualdad.

Se trata de un condenado por abusos sexuales a niñas de su propia familia y de uno de los maltratadores lucenses en prisión considerado más peligroso, que cumple pena por violar y torturar a su pareja. El alto tribunal provincial ha dado traslado de las peticiones a las partes para que expresen su opinión antes de decidir.

En el primer caso, quien solicita la rebaja de pena es un hombre que fue acusado por la Fiscalía de abusar de tres menores de su familia en diversas etapas, en una conducta repetida y sostenida en el tiempo. Sin embargo, le benefició la anterior ley, que dio por prescritos los abusos contra dos de las niñas y que además no consideraba violación penetración la introducción de sus dedos en la vagina de la pequeña. Consiguió de este modo que se le aplicase el tipo básico de la ley.

Sin embargo, según pudo saber este diario, la Fiscalía ha informado en contra de que se le rebaje la pena. Y no por la causa que recomendó la Fiscalía del Estado (si con la nueva ley se pudiera castigar el delito con la misma pena impuesta, no hay causa de rebaja), sino por una razón bien diferente: si se aplica la nueva ley en lo referente al delito por el que fue condenado, este tendría que ser considerado violación y la condena que le correspondería sería aún mayor.

Violador y maltratador

El otro caso es bien diferente, entre otras razones porque la condena inicial fue mayor y ya está cumplida en su mayor parte. Se trata de un joven que en 2010, cuando tenía 22 años, fue condenado a más de 16 por violación y varios delitos de lesiones contra la que entonces era su pareja. Para las agresiones sexuales no dudaba en amenazarla con una navaja y llegó a quemarla con cigarrillos en brazos y rostro.

Este hombre ha cumplido ya la mayor parte de su condena, y además lo ha hecho sin apenas gozar de beneficios penitenciarios ni permisos de salida, dado que siempre se valoró su alta peligrosidad. Una decisión favorable de la Audiencia, por tanto, lo dejaría de manera definitiva en la calle, ya que la rebaja podría llegar a hasta los cinco años.

La consulta de la sentencia ahora recurrida permite comprobar que su condena por agresión sexual fue de 12 años, la más baja del arco que marcaba la ley (permitía hasta 15 años). También es peculiar el razonamiento: "Teniendo en cuenta las circunstancias en la que se llevó a cabo la agresión sexual, esgrimiendo el acusado una navaja... y teniendo en cuenta que no llegó a amenazar a la víctima con hacerle un daño concreto, aunque aquel arma fuera utilizada para lograr la intimidación de la víctima, la pena a imponer debe ser de doce años".

Si los argumentos de este violador son atendidos en función de la ley del solo sí es sí, podría ver rebajada su pena en hasta cinco de prisión.
 

La jueza Sandra Piñeiro advierte que la violencia de género se ha disparado
La magistrada del juzgado de Instrucción número 2 de Lugo, Sandra Piñeiro señaló que se han "disparado" las cifras en violencia de género, a nivel nacional y en la provincia lucense. Piñeiro hizo estas declaraciones este lunes antes de participar en la inauguración de la jornada ‘Violencia económica sobre la mujer: Impago de pensiones’, organizada por la Subdelegación del Gobierno en Lugo con motivo de los actos del 25 de noviembre.

La jueza reconoció que la situación es "preocupante" y que todavía queda mucho camino por avanzar en materia de igualdad de género. "Existen carencias en la ley a efectos de perseguir las distintas manifestaciones de violencia de género, en este caso la violencia económica y patrimonial. Son conocidos algunos pronunciamientos, como la sentencia del Tribunal Supremo que habla por primera vez de violencia económica en el marco de la violencia de género respecto al impago de pensiones y alzamientos de bienes. Y también es muy conocida una sentencia del Penal número 2 de Mataró donde se proponía al gobierno directamente la tipificación de la violencia económica en el código penal, por lo menos en el impago de pensiones", dijo.

Durante la jornada, la subdelegada del Gobierno, Isabel Rodríguez, cifró en 100 el número de mujeres víctimas de violencia de género que perciben en la provincia la Renta Activa de Inserción, de 430 euros al mes, que pretende favorecer la independencia económica de las víctimas.